Storm la cuidaba con esmero. Después de cada partido la limpiaba y la engrasaba. Según decía, de ese modo no podía entrarle agua. El otro es el EMS FC , al que denominan los Toros , y son sus principales rivales no solo en el campo, sino también fuera de la cancha.
Jim , Kevin y Ronnie mantienen una tensión constante con los miembros del FC Rapitas , y pese a que también son compañeros de escuela no paran de generar problemas y altercados, estando provocándolos continuamente.
Esta animadversión se traslada, cómo no, al terreno de juego, en el cual nos encontramos con la particularidad de que ambos equipos se están jugando el campeonato de liga en un último partido que será definitivo.
Quien gane, se proclamará vencedor, lo que aumenta la emoción de la situación futbolística. Así, y por citar algunos ejemplos, asistimos a situaciones donde el protagonismo se lo lleva la solidaridad, el compañerismo, el valor del compromiso e incluso el del sacrificio. Y, también, otros temas de actualidad como el racismo o incluso ejemplos de bulling escolar, como el que sufre uno de los personajes por parte de otros alumnos.
También queda espacio para la intriga y la aventura, que se entremezcla de manera muy fluida con el resto de la trama, lo que añade un punto de interés a la lectura. Un par de sucesos en este sentido ayudan a mantener el suspense a lo largo de las páginas del libro. Y, para rematar la faena, asistimos a diferentes episodios donde la amistad, la responsabilidad y los primeros pasos en el terreno amoroso redondean un gran catálogo de situaciones que se convierten en enseñanzas útiles para el tipo de lectores al que la serie se dirige.
Una lectura en definitiva muy recomendable, en tanto que bajo el escaparate de la rivalidad entre dos equipos de fútbol se nos presentan numerosos temas de gran interés cuya resolución se convierten en una magnífica transmisión de valores.
Esta decisión fue un intento del VVD de poner el tema de los refugiados y la migración en el centro de la contienda electoral. El VVD esperaba que al girar más a la derecha en este tema, podría reunir apoyo suficiente para convertirse una vez más en el mayor partido del país. Rutte dejó paso a una nueva líder del partido, Dilan Yeşilgöz.
Yeşilgöz, ministra de justicia en el anterior gobierno, reforzó el perfil de derecha del VVD, especialmente a través de ejemplos exagerados sobre la supuesta facilidad con la que los migrantes pueden entrar en los Países Bajos.
La apuesta del VVD era que las elecciones se desarrollarían en una polarización entre ellos y el centro-izquierda sobre el tema de la migración, y Yeşilgöz fue presentada como la sucesora de Rutte. Esta táctica electoral parecía tener sentido: Rutte ha sido primer ministro desde , y mantuvo su popularidad siempre.
Al centrar la contienda electoral en la migración, el VVD esperaba evitar los problemas en los que es vulnerable, como la crisis de vivienda del país y el aumento del coste de vida. Sin embargo, el VVD terminó perdiendo 10 escaños, ganando solo Paradójicamente, la táctica del VVD funcionó demasiado bien.
El énfasis en una supuesta "crisis de refugiados" y la restricción de la migración benefició al partido que desde su fundación en ha hecho de la política antiinmigrante su núcleo: el PVV de Wilders. Sin embargo, no todo el crédito por la victoria de Wilders puede ir al VVD.
Un tropo periodístico en las últimas semanas ha sido que Wilders había "moderado" sus puntos de vista, pero el programa del PVV se mantuvo tan radicalmente antimigrante como siempre. El partido quiere cerrar por completo las fronteras a los solicitantes de asilo y "prohibir escuelas islámicas, Coránes o mezquitas" en los Países Bajos.
Tales políticas racistas se combinan con una retórica represiva sobre la "tolerancia cero para la escoria callejera", incluido el despliegue del ejército, la retirada de la nacionalidad y la deportación de delincuentes de doble nacionalidad y el arresto preventivo de quienes se considera que simpatizan con el "jihadismo".
Wilders no ha cambiado, lo que ha cambiado es la dinámica entre la derecha y la extrema derecha. Rutte eligió un enfoque de campaña de obviar a Wilders, su principal competencia a la derecha, desestimando las posiciones del PVV como "poco realistas" y presentando al VVD como el partido que podría implementar las políticas de derecha de manera más eficiente.
Este enfoque normalizó cada vez más las posiciones del PVV, posiciones que fueron rechazadas solo porque supuestamente eran imposibles de implementar. En lugar de intentar posicionarse como socio menor del VVD, Wilders insistió en su postura de ser la oposición de derecha a Rutte y siguió criticando sus problemas más importantes.
El 22 de noviembre, Wilders cosechó el fruto de este enfoque a largo plazo. También benefició a Wilders, a medida que consolidaba y expandía el voto de la derecha, que otro partido de la derecha, el FvD, que logró un éxito significativo hace unos años, hubiese entrado en crisis, en gran parte debido a la megalomanía de su líder Thierry Baudet.
Wilders es un político experimentado, uno de los miembros más veteranos del parlamento holandés y capaz de mirar más allá del próximo ciclo electoral.
Comenzó su carrera en el VVD a finales de los noventa, se escindió para formar el PVV en Inicialmente, el PVV combinó su racismo y su política antimigrantes con un discurso radical a favor del mercado, una versión radicalizada del neoliberalismo del VVD.
Sin embargo, en la última década más o menos, el PVV cambió su retórica a una especie de "chovinismo del bienestar", presentándose como el protector de la gente común y de los restos del sistema de bienestar holandés. Para el PVV, la causa última de la crisis del estado de bienestar es la presencia de comunidades de migrantes parásitos, especialmente musulmanes, en la sociedad holandesa y el desperdicio de dinero en "aficiones de izquierda", como políticas para mitigar el cambio climático.
Este dinero, sugiere el PVV, habría sido suficiente para proteger los niveles de vida del pueblo holandés "real". En su programa electoral, el PVV también presentó propuestas "progresistas", como la abolición del IVA en las necesidades diarias, la reducción de los costes de atención médica y la reducción de la edad de jubilación de 67 a 65 años.
Tales ideas son, sin duda, populares, pero son secundarias frente a la agenda central del PVV. El próximo congreso del PD parte de la toma de conciencia de la ausencia de identidad cultural y de proyecto político. Todo el debate gira en torno a las alianzas necesarias para sobrevivir, ya sea con el micropartido centrista Azione de Carlo Calenda y Matteo Renzi, o con la propuesta de izquierda del M5S de Giuseppe Conte.
El pueblo de izquierda , que antaño constituía la potente base de apoyo del PCI, ha desaparecido completamente. El número de miembros del partido —que en la época del PCI alcanzó la cifra récord de más de dos millones— ha caído en picado: Por mucho que el PD haya estado siempre, de una forma y otra, en el gobierno de a —con excepción del breve intermedio del gobierno Conte I [del 1 de junio de al 5 de septiembre de ]—, hoy no puede reivindicarse de ningún logro que muestre un perfil propio ante el electorado.
Solo consigue mantener cierta audiencia, al menos en las elecciones municipales —más en porcentaje en que cifras absolutas— gracias al hecho de que puede contar, en mayor medida que sus competidores, con una base organizada residual.
La victoria de la joven diputada italo-suiza-estadounidense Elly Schlein en las recientes elecciones primarias abiertas del PD se ha visto favorecida por un nivel de participación más elevado de lo previsto parece que han votado más de un millón de electoras y electores , lo que ha permitido invertir el resultado de la consulta interna , limitada a los miembros, que fue más favorable al otro candidato, el antiguo renziano Stefano Bonaccini [presidente de la región Emilia-Romagna desde diciembre de ].
Las declaraciones efectuadas por la nueva secretaria inmediatamente después del anuncio de los resultados confirman la flagrante contradicción entre las intenciones de Schlein y el patrimonio político del partido que está llamada a dirigir.
Los resultados de las elecciones primarias abiertas atestiguan el deseo generalizado de una gran parte de la base popular de centroizquierda de dar un giro político. Pero la nueva dirección, encabezada por la primera mujer secretaria, joven 37 años e inconformista abiertamente de orientación sexual no binaria , no cuenta con un aparato de apoyo en un partido hoy muy fuertemente cartelizado, con poderosas corrientes internas, que, por supuesto, son cualquier cosa menos expresiones de corrientes político-ideológicas que se enfrentan en torno a orientaciones diferentes.
Se trata más bien de grupos de poder que buscan repartirse los menguantes espacios de gobierno y subgobierno de que dispone el centroizquierda. Además, las fuertes contradicciones entre las declaraciones de la nueva secretaria y la herencia política del PD, por un lado, y la competencia entre las numerosas corrientes internas de las que Schlein seguirá siendo rehén , por otro, convierten en ilusoria una regeneración a la izquierda de este partido, incluso con esta nueva secretaria, que ha sabido recoger el impulso de cierto sector de la juventud que desea un reformismo social y medioambiental renovado.
Tiene a su favor la frágil baza de haber logrado instituir la renta de ciudadanía RdC , pero, como se menciona en la parte I de este artículo, el gobierno trata de contrarrestar la utilización de esta bandera.
Además, en su proyecto de desbancar al PD de su papel de partido central de la oposición a la derecha, Giuseppe Conte está pagando el precio de tener un partido desprovisto de toda estructura organizativa y de todo anclaje territorial y militante concreto.
En el país, sobre todo en el Sur, están surgiendo algunas iniciativas de masas en defensa de la RdC, pero todas a instancias de colectivos locales o sindicatos de base, completamente fuera del control del M5S. Las dificultades del proyecto de Conte se reflejaron en los decepcionantes resultados de las recientes elecciones regionales en Lacio y Lombardía, donde las listas grillinas quedaron muy por detrás de las del PD.
Pero estas fuerzas también cargan con el triste asunto que ha afectado a su diputado italo-marfileño Abubakar Sumahoro [Alleanza Verdi, Sinistra: alianza entre Europa Verde y Sinistra Italiana en Lombardía], cuya familia se ha visto implicada en un gravísimo episodio de corrupción y sobreexplotación de trabajadores inmigrantes.
En un país que lleva muchos años sin conocer luchas sociales y sindicales significativas, las grandes centrales sindicales son las principales responsables del crecimiento de la extrema derecha y de la marginación de la izquierda.
La última gran lucha social y sindical en Italia fue la de profesores y estudiantes en contra la reforma de la buena escuela promovida por Renzi y su gobierno.
Incluso aquella lucha solo encontró apoyo formal en las confederaciones y, en particular, en la CGIL, avergonzada de tener que apoyar una movilización contra un gobierno de centroizquierda.
Al final, incluso su propia federación del ramo decidió dejarlo estar y permitir que la ley fuera aprobada en el parlamento. Desde entonces hasta ahora, la CGIL y las demás confederaciones no han llevado a cabo ninguna movilización importante. Incluso la generosa movilización y lucha encabezada por los trabajadores de GKN [subcontratación automovilística] en Florencia, que intentaron plantear una batalla global contra las deslocalizaciones, se quedó en el más cínico aislamiento y ahora corre el riesgo de acabar en una dura derrota.
Los sindicatos de base o de lucha , también por su espíritu competitivo entre ellos y su dependencia política de sus círculos dirigentes históricos, no pueden y hasta cierto punto no quieren desarrollar un proyecto sindical alternativo frente a la inacción de los sindicatos mayoritarios.
Mientras tanto, si se observa la situación sobre el terreno, la desigualdad y la fragmentación social crecen sin freno y la acción gubernamental puede acentuarlas sin que nadie rechiste.
Las cifras bursátiles están ahí para demostrarlo. Por ejemplo, los beneficios netos del gigante petrolero italiano ENI se han duplicado con creces, pasando de 6. El mayor banco italiano, Intesa San Paolo, repartirá este año 5. De los La patronal manufacturera tampoco llora: la multinacional automovilística Stellantis [PSA-Fiat Chrysler] ha declarado un beneficio neto de Los cerca de Los salarios de los trabajadores y trabajadoras en Italia siguen siendo bajos, a pesar de la supuesta fuerza de los sindicatos.
Según el ISTAT, el instituto nacional de estadística, el salario medio neto anual de la clase trabajadora una vez deducidos impuestos y cotizaciones sociales es de Mucha gente se pregunta qué sentido tienen los sindicatos, que cuentan con unos 12 millones de afiliados, incluidos los pensionistas, si permiten que los trabajadores sean maltratados de este modo.
Esto, a su vez, es un potente motor de resignación, de desencanto y de fragmentación social. Meloni sabe que el proyecto de partido único de la derecha, por difícil que sea llevarlo a la práctica, podría, más eficazmente de lo que lo hace hoy la coalición tripartita, mantener a raya las desviaciones de los dos líderes menores, Matteo Salvini por un lado y Silvio Berlusconi por otro.
Las declaraciones destempladas de Berlusconi y en menor medida de Salvini expresan sin duda un deseo pronunciado de destacar, una voluntad de complicar la acción de la líder, a la vez amiga y competidora, antes subordinada y ahora dominante.
Pero esas declaraciones también expresan la existencia de enfoques diferentes en el plano interno los estratos sociales de referencia a los que dirigirse y en el plano internacional las posiciones geopolíticas.
Prueba de ello es el reciente intercambio de bromas pesadas a través de los medios de comunicación entre el máximo dirigente de Forza Italia y el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, que avergonzó e irritó sobremanera a la presidenta del Consejo italiano durante su visita a Kiev el 21 de febrero.
Si hubiera sido presidente del Consejo, nunca habría ido Putin, el 24 de febrero de , pensó que podía ir fácilmente a Kiev y poner a gente decente en el lugar de Zelensky y su gobierno… Todo lo que tenía que hacer [el jefe de Estado ucraniano] era dejar de atacar a las dos repúblicas autónomas del Donbás y todo esto no habría ocurrido, por lo que juzgo muy, muy negativamente el comportamiento de ese señor.
Las fuerzas de centroizquierda exageran mucho los supuestos efectos de estas diferencias de comportamiento y las tensiones políticas resultantes.
Pero mientras la oposición no se materialice en un movimiento de masas lo que, por desgracia, está muy lejos de ocurrir en estos momentos , estas diferencias no serán más que pequeños, aunque embarazosos, baches en el camino.
De todas maneras, la propuesta de Meloni de construir un partido único de derechas tiene quizá un objetivo más importante para ella, el de cortar aunque solo sea formalmente los vínculos, sin duda molestos, con su pasado neofascista.
Se trataría de retomar el camino ya trazado por Gianfranco Fini [procedente del MSI e iniciador del partido de extrema derecha Alianza Nacional en ], cuando, en , su partido se fusionó con Forza Italia para formar el Pueblo de la Libertad, porque el mero abandono del nombre MSI no bastó para borrar la naturaleza de su formación como partido de nostálgicos del régimen fascista.
Pero hoy habría una diferencia fundamental. Entonces, Fini estaba sometido al poder preponderante de Berlusconi dentro del partido unificado, que acabó expulsándole. Hoy, en un hipotético partido unificado de la derecha, Meloni estaría sin duda al mando.
El proyecto de Fini y Berlusconi fracasó en su momento. Incluso hoy, lo que dificulta mucho la unificación de la derecha es el afán patológico de los dirigentes por ponerse al frente de tal formación.
Hay, sin embargo, otro punto débil del que nunca habla la presidenta del Consejo, pero que pesa de forma silenciosa e insidiosa sobre los planes de Meloni: la naturaleza y las inclinaciones de su base militante.
Hasta ahora, la dirigente ha logrado contenerla. Ha logrado evitar celebraciones con saludos fascistas y actos agresivos tras su victoria electoral en septiembre de La base militante dispone de mecanismos de control interno mucho menos eficaces que los de la dirección del FdI. La presidenta del Consejo guardó silencio.
Sin duda, la repetición de este tipo de incidentes podría poner al Gobierno en más dificultades que las declaraciones inoportunas de diversas personalidades políticas. La presidenta del Consejo es muy consciente de la incómoda situación que vive su base militante, pero también es muy consciente de que no puede deshacerse fácilmente de ella, ni de palabra con declaraciones más valientes en sentido antifascista ni, mucho menos, rompiendo realmente los vínculos organizativos y afectivos con ella.
También sabe que, en la hipótesis, ciertamente lejana, de la aparición de embriones de un auténtico movimiento de masas antigubernamental y antifascista, estas brigadas de acción podrían resultar extremadamente útiles.
Fabrizio Burattini. Un gobierno fuerte que perjudica a las capas populares Así, de esa prueba electoral parcial, pero importante, el gobierno de Giorgia Meloni sale todavía más reforzado en su plan de intensificar la ofensiva antipopular, ya iniciada por el gobierno precedente de Mario Draghi [febrero de octubre de ].
- El nuevo hogar de Lucha Extrema es en el Club Villa Rivera, ubicado en el barrio de Tolosa, en *Calle 3 y *, a tan solo 6 cuadras de la estación Tolosa del Lucha por la victoria”, escrito originalmente el y publicado por la editorial Bruño el es el primer volumen de la serie La última gran lucha social y sindical en Italia fue la de profesores y estudiantes en contra la reforma de la buena escuela promovida por